Rembrandt fue un pintor y grabador nacido en Holanda el año 1606, partícipe e influyente del estilo barroco y escuela flamenca, considerado el mejor pintor de su país.

Se le recuerda y conoce por sus retratos de grupo, alejados de los convencionalismos. La composición, la caracterización de sus personajes, la agudeza de los rostros lo convierte en un maestro del estilo con obras llenas de vida e ingenio. En sus últimos años, el pintor eleva sus conquistas al plano de la madurez, culminando su estilo a base de años de experiencia y esfuerzo, mostrando un absoluto dominio en técnicas y efectos. Su obra de pinturas, grabados y dibujos es impresionantemente extensa, y es satisfactorio debido a que cada una de ellas es muy enriquecedora de su estilo y su propia marca.

Lo interesante de su obra es que nunca se encasilló en un estilo ajeno, sino que era él mismo el que lideraba las tendencias, innovaba y cambiaba su forma de pintar. Alrededor de su obra se han hecho toda clase de estudios históricos, teológicos y científicos, acerca de sus temáticas, composición, pinceladas, colores, sombras e iluminación, etcétera.